La soledad del hombre no es más que su miedo a la vida,
Eugene O’Neill
La soledad es volar entre niebla
Y sentir otros pájaros negros
Pasar cerca, sus sonidos
Su prisa y hambre que nada
Hacen en la tuya.
La soledad tapa sombras
E impide diferenciar aves reales
De sueños y pesadillas alados.
La soledad es un nado de estilo extraño
Y un camino hecho de espaldas,
Un laberinto con minotauro
Del que sales con su cabeza
O quedas suspendido como otro
Pájaro negro del que no sabes
Si eres tú mismo.
La soledad busca cuerpos cálidos
Y poseer almas. Susurra
Tergiversa y reina si la dejas.
La soledad es Ama o consejera
Acude a deshoras y siempre
Te acepta.
La soledad no es eterna
Muere contigo y se instala
En tu caja de madera.
Juego de ausencia y silencio
De ajedrez donde en el otro lado
Una fragua al fuego de reliquias
Esculpe lo que escuchas
Entre la niebla y los cuervos.